martes, 19 de febrero de 2008

Lo que sacas afuera es
La frontera de ti mismo

No hay sentido en soñar imposibles
Si no sientes lo que sueñas
Y no regalas lo que sientes
De qué sirve soñar
De qué sirve sentir
Si lo de dentro

Lo vuelcas fuera

Y solo tiene sentido sentir

3 comentarios:

Víktor Gómez Valentinos dijo...

Sergio:

El sentimiento no es finalidad, sino una ventana, un paso dentro de la cadena cognitiva.

En esta sociedad de la saciedad incumplida, del exceso de apetitos, de la sobreestimulación, vienes a decir, nuevamente, lo suficiente.

Vivimos con sobreabundancia y tú centras el discurso, abre tu propuesta hacia lo justo, esa justeza y justicia que dicen de lo que es preciso, de lo que no se descentra por lo superfluo.

Buen pensamiento, creo.

Un abrazo,

Viktor

ángel dijo...

Un gustazo haber descubierto este espacio literario. Recurriré a él con frecuencia.


saludos...

Anónimo dijo...

¡Hola! Soy Héctor Arnau.

Encontré vuestro blog buscando un artículo de David Barberá. Me gustaría haceros llegar el último poemario que saqué, "Y el hambre y los ciegos". Lo presento con una actuación ("Nuevo Amanecer del Activismo Folclórico") el próximo viernes 7 a las 23 horas en el Pinball (c./Concordia 3, Barrio del Carmen). Si queréis venir a cenar (es el 12o aniversario del bar) son 5 euros. Sois bienvenidos, hasta pronto.

(Y felicidades por el blog)