sábado, 7 de junio de 2008

LA BOCA DEL HOMBRE

Cielo aquí en la tierra
hasta que el hombre comprendió
que la fruta cae del árbol.
En la siguiente ocasión
ni siquiera le dejó tocar el suelo.

2 comentarios:

Víktor Gómez Valentinos dijo...

Al poder concentrar
lo extenso en unos
cinco versos, casi
28 palabras, historia
es poesía y el verbo
un bigbang. En menos
que dura la caída
de la manzana, haces
saltar por los aires
todo juicio y prejuicio.
Resta solo, adivina qué.


Un abrazote

Viktor

Javier Uve dijo...

Conciso en la forma, aparentemente llano, pero repleto de significaciones, enigmático: ¿un poema desplegable? Me gusta.

Saludos, Adrián.